Prométeme que cada día me despertare con un "buenos días, princesa", que yo te prometo desayunos de besos y risas.
Prométeme que no dejarás de quererme, que yo prometo quererte cada día un poco más.
Prométeme que no te alejarás de mi, que yo prometo no soltar tu mano nunca.
Prométeme que no vas a quitar la sonrisa de tu cara, yo prometo sacártela siempre.
Prométeme que estarás en los malos momentos, yo te prometo que los buenos vendrán solos y muy a menudo.